Parásitos

Enfermedades parasitarias en perros y gatos

En los animales de compañía, los parásitos, además de causarles serios problemas, representan una amenaza constante para la salud humana, sobre todo para los niños, ya que ellos conviven más directamente con perros y gatos. Es por esta razón por lo que el control de los parásitos es indispensable.

Los perros y gatos se ven atacados por dos grandes grupos de parásitos: externos e internos. En el primer grupo encontramos pulgas, garrapatas, ácaros y piojos. Y dentro de los parásitos internos hay digestivos, respiratorios, urinarios, circulatorios, etc. 

Los parásitos de perros y gatos viven de ellos, por lo tanto consumen los nutrientes que posee el animal. Los parásitos tratan de vivir en equilibrio con el animal parasitado, pero llega un momento donde ese equilibrio se rompe poniendo en serio peligro la vida de nuestra mascota.


Los parásitos tratan de vivir en equilibrio con el animal parasitado, pero llega un momento donde ese equilibrio se rompe


Parásitos externos

  • Dermatitis Alérgica. Los parásitos externos más comunes en perros y gatos son las pulgas. La pulga adulta se alimenta sólo con sangre de sus huéspedes causando intenso prurito e irritación por su mordedura, que es constante, y la secreción salivar de productos tóxicos y alergénicos. También son transmisores de tenias y otros agentes patógenos como virus, protozoos y bacterias. Esta dermatitis muestra síntomas de intenso prurito que da lugar a autolesiones por el rascado, alopecia y complicaciones por bacterias que aprovechan las lesiones cutáneas para  invadir el tejido cutáneo.
  • Ricketsiosis. Es una enfermedad transmitida por garrapatas. Son parásitos chupadores de sangre y dependen de factores ambientales como temperatura y humedad para desarrollarse. Se trata de una enfermedad grave y requiere de tratamiento de antibioterapia. Los síntomas más frecuentes son fiebres altas, debilidad, anorexia, y anemia. En muchos casos también aparecen  síntomas de debilidad posterior  y parálisis.
  • Sarna. Los ácaros son parásitos que no sólo afectan a perros y gatos sino que también pueden afectar a pájaros, conejos y reptiles. Tienen un potencial zoonótico, es decir, que pueden afectar a los seres humanos. Las lesiones de esta enfermedad pueden ser localizadas (cara y extremidades delanteras) o bien generalizadas. Las lesiones aparecen enrojecidas, sin pelo y rara vez producen picor. Es una enfermedad en la que intervienen muchos factores, pero hay que destacar la alteración del sistema inmune.

Parásitos internos

  • Problemas gastrointestinales en cachorros. La principal sintomatología de los cachorros  cuando los parásitos son del tipo giardias, coccidios, toxicara, trichuris son diarreas acuosas, amarillentas en algunos casos, vómitos, náuseas, decaimiento, dolor abdominal, anemia, etc… 

Las diarreas y vómitos son síntomas serios, ya que estamos hablando de cachorros, animales de pocas semanas de vida, que a causa de los mismos pueden deshidratarse seriamente y morir. 

Llega un momento cuando hay diarreas en el que, si no cesan, se dañan las células intestinales  (enterocitos) y las bacterias, que son flora normal del intestino, pasan a la sangre causando una septicemia y compromiso severo de la vida del paciente.

  • Parásitosis por nematodos. Estos parásitos pueden afectar tanto a animales como a personas. Los animales afectados muestran síntomas de enteritis y mala absorción de los nutrientes con la consecuente pérdida de peso. Otros síntomas que pueden aparecer son rinitis, tos, vómitos y diarreas, en cachorros se producen alteraciones del crecimiento.

Conclusiones

Cuando hablamos de enfermedades parasitarias podemos aplicar el dicho “Más vale prevenir que curar”. La prevención frente a los parásitos tanto externos como internos, puede evitar muchos problemas a nuestras mascotas y también a las personas, en especial a los niños que conviven con ellos.

Son enfermedades a las que nos enfrentamos a diario y con una incidencia muy alta. Hoy en día hay multitud de productos antiparasitarios muy fáciles de aplicar y con una elevada eficacia. Es por todo esto que recomendamos acudir al veterinario para que establezca  un plan antiparasitario para nuestras mascotas y  de esta forma, junto con las vacunas, proporcionales un estado sanitario idóneo.

 

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